Las juntas de goma son componentes integrales de la fontanería del fregadero. Ayudan a prevenir fugas y también evitan que el agua se escape donde no debe. Sin embargo, sin un buen sello de goma, el agua puede filtrarse y crear desorden en tu cocina o baño. En este artículo, discutiremos la importancia de juntas y sellos cómo cambiarlas fácilmente, las ventajas de usar una buena junta de goma, los problemas que puedes tener con juntas viejas y cómo cuidar la junta de goma de tu fregadero.
A. El aro de goma es una pequeña pero resistente parte de tu fregadero. Para crear un sello ajustado, se coloca entre el fregadero y el desagüe. Este sello evita que el agua se filtre del fregadero y haga un desorden en tu hogar. Si tu jorobado está dañado, podrías tener agua filtrándose por todas partes. Por eso quieres asegurarte de que tu jorobado de goma del fregadero esté intacto y funcione correctamente.
Si notas una fuga en tu fregadero, es posible que necesites reemplazar el jorobado de goma. Aquí tienes algunos pasos simples que te permitirán cambiar el jorobado de goma de tu fregadero:
Un buen sello de goma de calidad para el fregadero te ahorrará tiempo y dinero en el futuro. Un sello robusto crea una junta hermética que previene fugas y mantiene el agua exactamente donde debe estar. Las juntas más baratas no son tan duraderas como las de alta calidad. Por lo tanto, te debes a ti mismo instalar una buena junta de goma en tu casa y ahorrarte el costo de reparaciones.
Algunos problemas comunes si la junta de goma de tu fregadero es vieja o desgastada. Si tu junta necesita ser reemplazada, las fugas son el mayor indicador. También podrías notar agua acumulándose alrededor del fregadero o detectar un olor a moho que proviene del drenaje. Si estos problemas no se abordan a tiempo, pueden llevar a daños por agua y moho. Observa la junta de goma de tu fregadero y cámbiala cuando sea necesario para evitar estos problemas.