Las juntas de goma alrededor de nuestras ventanas mantienen nuestros hogares cálidos en invierno y frescos en verano. Con el paso de los años, pueden envejecer y romperse. Esto puede permitir que entre aire frío o caliente, lo que dificulta mantener la temperatura adecuada en nuestras casas.
Si notas que las juntas de goma de tus ventanas parecen dañadas o desgastadas, puede ser hora de reemplazarlas. Aquí te explicamos cómo hacerlo tú mismo, paso a paso:
A continuación, toma la medida de esa longitud donde se colocará la nueva junta en el marco de la ventana. Usa una cinta métrica para asegurarte de obtener el tamaño correcto.
Finalmente, asegúrate de que la nueva junta esté bien adherida cerrando la ventana y buscando corrientes de aire. Si todo está bien, ¡acabas de reemplazar la junta de goma de tu ventana!
Reemplazar las juntas de goma desgastadas en las ventanas previene las corrientes de aire y mantiene tu casa calentita. Las grietas hacen difícil calentar o enfriar tu hogar, y pueden hacerte pagar facturas de servicios más altas. Así que reemplaza las juntas de goma desgastadas para mantener el aire frío afuera cuando intentas mantenerte caliente, y para mantener el calor afuera cuando necesitas mantenerte fresco.
Mantener tu hogar eficiente es vital y puede ayudarte a ahorrar mucho dinero en las facturas de calefacción y refrigeración. Cuando las juntas de goma de tus ventanas se desgastan, el aire puede escaparse, lo que obliga a tu sistema de calefacción o refrigeración a trabajar aún más para mantener la temperatura deseada. No solo ahorras en las facturas, sino que también ayudas al planeta reduciendo la contaminación al reemplazar estas juntas.
Poner nuevas juntas de goma en tus ventanas es bastante sencillo. Puedes hacerlo tú mismo en unos pocos pasos fáciles y con algunas herramientas comunes. ¡Aquí tienes algunos consejos útiles!